23 mar 2015


"La llegada de la primavera implica un aumento de la intensidad y duración de la exposición a la luz solar. Ésta ingresa a través de nuestros ojos hasta la glándula pineal, ubicada en el cerebro, afectando la secreción de la melatonina -hormona relacionada con la regulación de ciclos circadianos como el de sueño-vigilia y también con la estabilidad del ánimo-. Esto produciría mayor sensibilidad y cambios emocionales en los sujetos.
Hay un cambio brusco en la realidad externa que influye en el estado interno de las personas"

2 comentarios:

Uno dijo...

Eso y que la sangre altera.

deWitt dijo...

Pánico le tengo yo a la primavera...